Pablo Dorigo, nacido en 1992, es un diseñador multidisciplinar ítalo-español. Comenzó su formación en la IUAV de Venecia en la prestigiosa École Cantonale d’art de Lausana (ÉCAL), donde participó en proyectos de investigación innovadores, en estrecho contacto con profesionales del sector como Sebastian Wrong y Erwan Bouroullec. Ha tenido experiencia en estudios internacionales como LaGranja Design Studio de Barcelona y en el estudio Gam Fratesi en Copenhague, diseñando para marcas reconocidas como PoltronaFrau, Hermès, De Padova y Gubi e Porro. Desde 2019 vive en Copenhague, donde trabaja como diseñador independiente. Algunos de sus proyectos han sido publicados en revistas prestigiosas como Dezeen, Interni, Domus, Elle Décor, Icon Design.
«Mi primer acercamiento a un proyecto es la emoción, es el placer, es la sensualidad», explica Pablo. «Me ayudaron mucho las palabras de Ettore Sottsass, que afirmaba tener una relación erótica con el diseño. El mío es un proceso casi obsesivo.
Empiezo a partir de un sentimiento de inadecuación, de rebeldía, con respecto al modo en que se ha enfocado ese proyecto hasta ahora, me sumerjo completamente en él, con todos mis sentidos, y, cuando encuentro la solución, es como una catarsis».
El proyecto de investigación «From Venice with Algae» realizado para Favini es un ejemplo perfecto del enfoque «multisensorial» de Pablo sobre el diseño. Buscando aplicaciones prácticas para Shiro Algae Paper®, un papel realizado por Favini reutilizando las algas contaminantes de la laguna de Venecia, Pablo estudió el proceso de elaboración, reproduciéndolo él mismo. Exploró el potencial del material, el color, la textura y ha llegado a dos ideas; la primera escultural y artística, una serie de máscaras venecianas realizadas con papel; la segunda, una línea de estampillas que pueden reproducirse en serie y a gran escala.
«Las máscaras, con su capacidad universal de contar lo grotesco y lo sublime de la historia humana, me parecieron perfectas para expresar la belleza ambivalente de Algae Paper®», dice Pablo. «Por otro lado, para llevar a todo el mundo la historia de este extraordinario papel, escogí un objeto pequeño, sencillo y de uso común como las estampillas, que tienen en sí mismas un increíble poder viral y narrativo, además de un alto nivel de tecnología».
«Los temas en los que me encanta trabajar son principalmente dos», añade Pablo. «La búsqueda de la tranquilidad, es decir, de una estética alejada del ruido, suave y no agresiva, y la búsqueda de lo esencial, de una idea genuina, a la que no se deba añadir nada más para reconocer su eficacia».
El proyecto de la silla Altopiano, presentada en la Milan Design Week en 2019, es un objeto que transmite calma, gracias a un retorno a la esencia y a un equilibrio entre peso y proporción.
«Altopiano nace a partir de una necesidad íntima de representar a mi tierra de origen, Friul, y su reconocida capacidad en el trabajo de la madera», dice Pablo.
Descubre los productos de Pablo Dorigo
La relación profesional con el Grupo MCZ empezó en 2015, con la realización del primer afortunado producto, la estufa de pellet Curve.
«Me puse al servicio de la empresa para diseñar un objeto que no llevase mi firma, pero que fuese una especie de arquetipo universal de la idea de estufa», dice Pablo.
Curve, muy apreciada por los clientes de toda Europa, también fue objeto de un cortometraje en vídeo poesía en 2017 y de la campaña publicitaria de MCZ, emitida por la redes de televisión RAI y France Télévision en 2019-20-21.
